+ Sangre por tinta

Y seguimos con la negociación islámica de sangre a cambio de caricaturas. En Dinamarca no parecen muy dispuestos a renunciar a su libertad de expresión y Lars Hedegaard publicará un nuevo libro con caricaturas del profeta pedófilo.

Como es obvio los seguidores de la Religión de la Paz no se han hecho esperar y se han descolgado con amenazas.

No se sabe nada de los musulmanes moderados -y lo que se sabe preferiríamos no saberlo-, y de los occidentales islamofílicos tampoco sabemos nada, a ver si la buena de Ruby nos adelanta algo, pero un manto de silencio se cierne sobre la sangre que se paga por la tinta.

¿Por qué es necesario pagar con sangre la tinta usada en ejercicio de la libertad de expresión? Resulta difícil responder a esta pregunta si uno tiene un mínimo de sentido común. La realidad es que resulta necesario pagar con sangre porque hay un grupo minoritario de personas en este planeta que se empeña en vivir sus vidas organizados según un código de conducta de un señor de la guerra del siglo VII y porque, además, hay otro grupo mayoritario de personas que ven bien este tipo de barbarie.

Por Maestre de Campo