+ Anuncio de la casa, ¿es que me voy? NO

Muchos vienen con gozo a pinchar, otros lloran, pero yo... Sólo deciros toca que este blog, Cómo ser de derechas, va más allá de Zapatero y seguirá abierto cuando éste pierda las elecciones municipales como ocurrió hace un año, y cuando pierda las generales de 2012 (si no las adelanta por la crísis económica que llega).

Ayer el PP perdió unas elecciones donde el PSOE ganó 40.000 votos más frente a los 400.000 nuevos votantes del Partido Popular. Unas elecciones donde el PP ha conseguido votantes socialistas a espuertas en las regiones moderadas -incluso en Cataluña-, y donde el PSOE ha mantenido el mismo resultado de hace cuatro años (lejos aún de las mayorías absolutas que sí han conseguido Aznar o Aguirre) gracias a los votantes de IU y sorpresivamente ERC, sí, esos radicales, que ya no atisban la línea que separaba al antiguo PSOE de los más deplorables independentistas.

La estrategia del odio de Zapatero ha conseguido que ahora un 10% de sus votantes sean indepentistas y comunistas. Su golpe en las urnas, ha de reconocerse, aún lejos de la mayoría absoluta, pero nuestra victoria moral ha sido enorme.

Siento deciros amigos progres que raudos veníais a restregarme esta pírrica victoria por puntos, que Prevost no llora, todo lo contrario, sonríe con su mirada puesta ya en los siguientes comicios:




Donde hayan hombres libres peleando, ahí estaré, donde hayan españoles que creen en su nación y constitución, ahí estaré. Donde haya víctimas del terrorismo acosadas por un Zapatero, ahí estaré. Donde haya independentistas -que ahora votan al PSOE- que deseén cerrar la COPE, ahí estaré. Donde haya padres que desean escolarizar a sus hijos en castellano, ahí estaré, donde haya empresarios catalanes obligados a rotular en el idioma que no desean, ahí estaré, donde haya padres que no desean el estado se entrometa en la educación de sus hijos, ahí estaré.

En resumen, y citando a Goethe:

La libertad es como la vida,
sólo la merece quien sabe conquistarla todos los días!

Por Prevost